Ek Balam: Historia y Misterio en la Selva Maya

Hace unos días visité Ek Balam, un sitio arqueológico maya poco explorado pero fascinante. Ubicado entre Valladolid y Tizimín, su nombre significa "Jaguar Negro" o "Lucero Jaguar", reflejando su misticismo. Se dice que fue fundado por un señor llamado Ek Balam o Coch Cal Balam, aunque la evidencia arqueológica no lo confirma.

Imagen: Ek Balam.Sefotur

Su mayor esplendor ocurrió entre los años 600 y 900 d.C., cuando probablemente fue la sede del reino de "Tlalol". Su primer rey conocido, Ukit Kan Le’t Tok, transformó la ciudad con impresionantes estructuras, como la Acrópolis, que alberga la tumba real en la Sak Xok Nahh o "Casa Blanca de la Lectura", con una ofrenda de más de 7,000 piezas de cerámica, concha y caracol.

Imagen: Cenote Xcanché en Ek Balam.Sefotur

Cerca de la zona arqueológica se encuentra el Cenote Xcanché, una joya natural donde los visitantes pueden nadar en aguas cristalinas, practicar rappel y disfrutar de la selva maya. Es el complemento perfecto para una visita a Ek Balam, ofreciendo un espacio de conexión con la naturaleza después de explorar la historia de la antigua ciudad.

Imagen: Ek Balam.Sefotur

Caminar por Ek Balam es una experiencia única. Sus templos, inscripciones y la energía del lugar te transportan al pasado, revelando la grandeza de la civilización maya. Si tienes la oportunidad, no dudes en visitarlo: historia y naturaleza en un solo destino.