Bajo el cielo maya: mi travesía entre cenotes, buggies y naturaleza en Homún

Dormir en medio de la naturaleza, en una habitación cómoda y rodeada de paz, ya es una experiencia en sí misma… pero cuando te hospedas en Viatura Xtujil, esa tranquilidad se transforma en el punto de partida para descubrir un Yucatán auténtico, profundo y lleno de sorpresas.

Imagen: Gina Alfeiran. Hacienda abandonada en Homún, Yucatán

Desde ahí salimos temprano por la mañana, en camioneta, rumbo a un punto cercano donde nos esperaban los buggies. La emoción comenzó al subirnos: el viento en la cara, el olor a selva y ese aire de aventura que solo los caminos de terracería pueden regalar. Recorrimos senderos escondidos, pasamos por antiguas haciendas abandonadas, cruzamos paisajes de vegetación viva y fuimos testigos del esplendor natural que guarda esta región.

Imagen: Gina Alfeiran. Iglesia abandonada en Homún, Yucatán

Nuestra ruta incluyó dos cenotes: Chenké y Santa Lucía, y cada uno nos ofreció algo completamente diferente pero igualmente inolvidable.

Imagen: Lourdes Cruz. Centore Chenké, Homún, Yucatán

En Chenké, rodeado de árboles y con un acceso amigable, nos esperaba una sorpresa inesperada: un grupo de pájaros Tho, con sus vibrantes plumas azules y su vuelo elegante. Fue como un regalo de la naturaleza, un momento de esos que no se planean pero se quedan para siempre en la memoria.

Imagen: Gina Alfeiran. Cenote Santa Lucia, Homún, Yucatán

Llegamos a Santa Lucía, un cenote tipo caverna que nos recibió en absoluta calma. Estar prácticamente solos en ese lugar fue un privilegio. El eco dentro de la cueva, el agua cristalina y la sensación de estar en un sitio sagrado, hicieron que todo se volviera más íntimo, más especial. Poder nadar ahí, sin prisa, sin interrupciones, fue una conexión directa con la historia viva del agua en la cultura maya.

Imagen: Lourdes Cruz. buggies en senderos de Homún, Yuncatán

Toda esta experiencia fue posible gracias a la estancia en Viatura Xtujil, un sitio que te invita no solo a descansar, sino a salir y explorar. A vivir aventuras que van más allá del turismo tradicional, conectándote con la esencia de Yucatán: su gente, su tierra, su historia.

Imagen: Gina Alfeiran. Homún, Yucatán

Y es que bajo el cielo maya, rodeada de selva, aves y agua sagrada, entendí una vez más que viajar es también un acto de gratitud.