¡No te pierdas esta experiencia única que combina la grandeza de la naturaleza con el legado de la civilización!

¿Listo para una aventura que te dejará sin aliento en el corazón de Puebla? Olvídate de las guías turísticas convencionales y adéntrate en un rincón que mezcla la sorprendente arquitectura de sus iglesias con una laguna de azul único. Estamos hablando de Aljojuca, un pequeño municipio que se encuentra escondido en el estado de Puebla y que guarda un tesoro natural inigualable.

El nombre de Aljojuca proviene del náhuatl "atl", "xoxouhqui" y "can", que traducido al español significa "en el agua azul celeste", haciendo referencia al color de la famosa laguna de la región. 

Pero lo que realmente hace que Aljojuca sea un destino imperdible es su maar, un fenómeno geológico impresionante que se caracteriza por lagos que ocupan cráteres de antiguos volcanes. ¡Y no, no tienes que viajar a otro rincón del país para encontrar uno! Además de Aljojuca, puedes disfrutar de estos majestuosos maars en la Reserva del Pinacate, en el estado de Sonora.

Este cráter volcánico se formó debido a una erupción freática magmática, que básicamente significa que el agua subterránea entró en contacto con el magma o lava caliente, generando una explosión. 

Con el paso del tiempo, el cráter se llenó de agua y dio lugar a la laguna de color azul celeste que podemos contemplar hoy. Con aproximadamente un kilómetro de diámetro y 100 metros de profundidad, esta laguna es un espectáculo en sí misma. Además, durante el invierno, sus aguas cambian de azul a verde esmeralda debido a una mágica combinación de minerales y azufre.

Ahora, debes tener en cuenta que esta laguna no es precisamente una playa, pero su belleza te dejará sin palabras, independientemente de la época en que la visites. Además, desde aquí podrás disfrutar de una de las vistas más impresionantes de todo el país: el majestuoso Citlaltépetl, también conocido como el Pico de Orizaba.

Las opciones para los amantes de la aventura son innumerables. Puedes emprender caminatas por senderos serpenteantes, recorrer la zona en bicicleta de montaña, acampar bajo las estrellas, avistar flora y fauna endémica, aventurarte en un paseo en lancha o probar suerte con la pesca deportiva en invierno. Y si eres un intrépido nadador, no dudes en sumergirte en sus profundas aguas, siempre con tu confiable chaleco salvavidas.

Pero la aventura no termina en el cráter. Te recomendamos regresar al pueblo y sumergirte en su atmósfera única. Aquí, el tiempo parece haberse detenido, y las edificaciones antiguas cuentan historias del pasado que te transportarán a otra época. 

El pueblo se encuentra en lo alto de la laguna, y una de sus joyas arquitectónicas más destacadas es la iglesia de la parroquia, que data del siglo XVI. Además, no puedes dejar de visitar la iglesia del Calvario, una construcción que se completó a principios del siglo XIX y alberga impresionantes pinturas al óleo que datan de 1907.

Imagen: Twitter, Aljojuca en Puebla

Otro lugar imperdible es la ex hacienda de Caxcatla, una joya barroca construida en 1702 por monjes franciscanos. Aquí, podrás recorrer pasillos que guardan las historias del pasado y, según cuentan, un tesoro que perteneció al ex presidente Carranza está oculto en algún rincón de esta magnífica hacienda.

¡No te pierdas esta experiencia única que combina la grandeza de la naturaleza con el legado de la civilización!