Mayapán, el último gran refugio Maya cerca de Mérida

Visitar Mayapán es como abrir una ventana al pasado y adentrarse en uno de los capítulos más fascinantes de la historia maya. A poco menos de 50 kilómetros de Mérida (aproximadamente 40 minutos en carretera), esta zona arqueológica se presenta como un secreto bien guardado, mucho menos concurrido que Chichén Itzá o Uxmal, pero cargado de un magnetismo especial.

Imagen: Sandra Salvado.Mayapán, Yucatán

Caminar entre sus más de 4,000 estructuras me hizo imaginar cómo fue la vida en esta antigua ciudad fortificada que, en su momento, llegó a albergar a más de 12,000 habitantes. Sus murallas todavía resguardan la memoria de un sitio que fue centro político y religioso tras la caída de Chichén Itzá, convirtiéndose en el lugar donde se congregaban las élites mayas para mantener el control de la península.

Imagen: Yucatán Turismo.Mayapán, Yucatán

Entre templos, altares, plataformas y su imponente pirámide principal —la réplica en menor escala de El Castillo de Chichén Itzá—, la sensación es de estar caminando en un espacio donde se mezclaban poder, alianzas y rituales sagrados. Los vestigios de murales y esculturas hablan de ceremonias dedicadas a Kukulkán, el dios representado como la serpiente emplumada, reafirmando la grandeza que Mayapán tuvo como epicentro de la política y espiritualidad en la región.

Imagen: Yucatán, Turismo. Mayapán. Yucatán

Lo que más me sorprendió fue la atmósfera tranquila del lugar: no hay grandes multitudes, y eso permite recorrerlo con calma, detenerse en cada rincón, subir algunas estructuras y contemplar el paisaje que rodea la antigua ciudad. Aquí el tiempo parece detenerse, y uno puede conectar con la fuerza de un pueblo que supo resistir, reorganizarse y crear un nuevo centro de poder tras las caídas de sus grandes urbes.

Mayapán no es solo un sitio arqueológico, es un viaje íntimo hacia las raíces mayas, a tan solo unos minutos de Mérida.