Un Paseo Sabroso por la Calle 47 en Mérida, Yucatán
Un recorrido de sabores y bebidas para disfrutar
Si estás en Mérida y te gustan los buenos sabores, no puedes perderte el recorrido gastronómico de la Calle 47. Este rincón de la ciudad se ha adaptado para que lo puedas disfrutar caminando, ya sea para desayunar en alguno de sus encantadores cafés, disfrutar de una comida completa o simplemente pasar una noche divertida en sus bares con amigos. Este paseo va desde la Calle 56 hasta la 48, justo al inicio del famoso Paseo de Montejo, uno de los puntos más icónicos de Mérida.
Imagen: Gina Alfeiran. Corredor Gastronómico de la 47.
Lo que me encanta de esta calle es su versatilidad. En la mañana, puedes encontrar lugares tranquilos para tomar un buen café y probar opciones deliciosas para desayunar, como en Latte Quattro Sette, donde el avocado toast o un buen croissant acompañan perfectamente tu primera comida del día. Si prefieres algo más creativo, hay cafés que también funcionan como galerías de arte, lo que le da un toque cultural y único a tu visita.
Imagen: Gina Alfeiran. Corredor Gastronómico de la 47.
A medida que avanza el día, la Calle 47 cobra vida con restaurantes de todo tipo. Desde la cocina yucateca tradicional hasta propuestas internacionales como italiana, oaxaqueña, y muchas fusiones interesantes. Aquí cada lugar tiene su propia personalidad, como Micaela Mar y Leña, famoso por sus platillos de mariscos cocinados al fuego de leña. Si buscas una cena más casual, también encontrarás bares con terrazas ideales para disfrutar de una cerveza artesanal o un buen cóctel al aire libre.
Imagen: Gina Alfeiran. Corredor Gastronómico de la 47
Algo que no muchos turistas saben es que esta calle es un favorito también entre los locales, lo que le da una atmósfera más auténtica y menos turística. Además, el recorrido conecta con el Gran Parque de La Plancha, otro lugar lleno de vida en Mérida, pero ese te lo contaré en otro momento.
Imagen: Gina Alfeiran. Corredor Gastronómico de la 47
Si te animas a visitarla, te aseguro que siempre encontrarás algo delicioso que probar, una buena conversación que tener, y un ambiente agradable que disfrutar. ¿Qué más se puede pedir de una calle tan especial?
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