¡Mazatlán: Un Refugio para las Almas Tradicionales!
Un destino con espacios modernos y tradiciones que harán revivir la esencia de los que una vez habitaron.
En la costa de Sinaloa se encuentra Mazatlán, un balneario mexicano que es reconocido por su oferta cultural, ocio y playas maravillosas. También conocida como La Perla del Pacífico, está bordeada por uno de los malecones más grandes del mundo que nos dan paso a visitar las convergencia entre lo cálido de la arena y sus frescas aguas. Para disfrutar Mazatlán al máximo, te compartimos algunos de los lugares de este destino.
Playas
Al visitar Mazatlán podrás notar que en sus playas encontrarás tranquilidad para visitar en familia o simplemente recorrer la costa al atardecer y disfrutar del paisaje. En cambio, si quieres divertirte también podrás realizar diferentes actividades.
- Cerritos: enamórate del azul intenso del agua que contrasta con la blanca y fina arena. Esta playa es ideal para disfrutar el atardecer en compañía de toda la familia. Solo toma precauciones, pues en ocasiones las medusas te sorprenderán.
- Olas Altas: ideal para los amantes del surf debido a sus olas camaleónicas. Esta playa es ideal si buscas diversión, pues la rodean bares, restaurantes y tiendas. Además podrás visitar el Viejo Mazatlán.
- Los Pinos: relájate mientras te bañas en los colores rojizos de esta playa. Sus aguas son tranquilas por las que podrás disfrutar del oleaje y de vez en cuando ver un surfista.
- Playa Isla de Venados: de arena blanca y aguas cristalinas es ideal para observar las maravillas que se albergan en lo profundo. Podrás practicar snorkel, kayak o simplemente nadar.
- Playa Barra de Piaxtla: de aguas cálidas y fina arena es una de las playas más relajantes. Su tesoro en el acantilado Punta Piedra de material volcánico que se ha preservado por millones de años, también podrás observar rocas volcánicas talladas por los aztecas. No te vayas sin observar los venados, coyotes y jaguares que habitan la zona.
Recintos históricos y culturales
Si visitas este destino, sus rincones te sorprenderán. Cada uno está lleno de color, fiesta y mucha vida, que te harán revivir el pasado del lugar.
- Centro histórico: en las grietas de sus edificios no oculta lo antaña que es la ciudad, sin embargo, sitio ideal para tener un momento de paz. Sus calles nos dejan ver la arquitectura tradicional que encontramos en el Teatro Ángela Peralta, el Museo de Arqueología y las cafeterías de la zona.
- Catedral Basílica de Mazatlán: al estilo gótico, este templo es uno de los principales de la ciudad. Cuenta con una cúpula octagonal y un altar con imágenes talladas en mármol de Carrara.
- Copala: un pueblo minero de calles empedradas resalta por su belleza y tranquilidad. Aquí podemos encontrar la Iglesia de San José de estilo barroco y la Hacienda de Guadalupe que albergan las ruinas de una iglesia. Al caminar por sus casas podrás encontrar diversos locales de artesanías hechos por los locales.
- Plazuelas República y Machado: reconocidas por sus jardines están situadas en el centro de la ciudad- Se encuentran rodeadas de edificios coloniales y kioscos de estilo francés en los que puedes obtener buenas fotografías de tu visita.
- Acuario: ideal si vas con los más pequeños de la familia. En este espacio podrás conocer sobre la flora y fauna del lugar. Además cuenta con una sección de juegos ecológicos, exhibiciones de buceo y un espacio para fiestas y celebraciones.
- Festival Cultural: este es un evento dedicado a las diferentes expresiones culturales como la música, danza, teatro y literatura y se realiza en los recintos culturales de la ciudad durante el último trimestre del año.
Gastronomía
Mazatlán no sólo son sus playas, sino una mezcla cultural que ha persistido con el tiempo. Lo encontramos en su arquitectura, pero también en sus sabores acoplando la historia prehispánica con lo colonial, sus costas y el amor de su gente.
No nos podemos olvidar de los mariscos, y mucho menos de su camarón local reconocido por pesar alrededor de medio kilo. De aquí se desprenden los platillos y sazones de cada restaurante.
Otra de las especialidades del lugar es la machaca frita con huevos revueltos, chilorio, ceviche de camarón en aguachile, marlín ahumado, sopa costeña, pichones empapelados, crema de garbanzo, la cecina de res, las carnitas y el pollo estilo Sinaloa; acompáñalos con las bebidas típicas, el tejuino, el agua de cebada, ciruela y melón. Para cerrar con broche de oro prueba los postres como los tacuarines, el pan de mujer y el turrón de miel y cacahuete.
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